sábado, 24 de junio de 2017

Relato en forma de carta: La amistad

Querida amiga:
¿O debería decir ex-amiga? Duele poner esa partícula que conlleva el hecho de que nuestra amistad se ha terminado.
Durante años fuimos prácticamente inseparables. Aunque solo nos veíamos un par de veces a la semana el contacto era continuo. Hablábamos todos los días. Cualquier pequeño detalle, cualquier anécdota por banal que fuera era digna de ser compartida con la otra. Y, de repente, de un día para otro, decides terminar con todo. No se aún muy bien el porqué. Desconozco qué he podido hacer para pasar de ser imprescindible en tu vida a sobrar en ella. Y no lo se porque ni siquiera me has dado la oportunidad de hablar al respecto.
Te echo de menos. Mucho. Incluso a veces he cogido el teléfono para enviarte un mensaje porque he visto una foto o escuchado una canción que me recordó a ti. Por suerte siempre me doy cuenta a tiempo de que ya no te importa. Soy consciente de que la amistad puede no ser eterna pero la nuestra tenía tantas papeletas para serlo...Lo que sí que no me esperaba es que tuviese este final.
Durante un tiempo tuve la esperanza de que recapacitaras, de que vinieras a hablar conmigo y todo quedaría en un mal recuerdo. Pero ya no. Es más, ahora ya no quiero que vuelvas. Que gracia ¿no? Porque estoy segura de que ni se te ha pasado por la imaginación.
Deseo de todo corazón que la vida te trate bien. Espero que tus sueños se cumplan porque, a pesar de todo, creo que te lo mereces, te mereces todo lo bueno que te pueda pasar. 
Pero también deseo que, en algún momento, te acuerdes de mi, y me eches de menos y sí, ¿por qué no? te arrepientas de haber actuado como lo hiciste. Ya será tarde, ya no habrá solución pero quizá te sirva para conservar otras amistades en el futuro.
Sin más, me despido. Fue bonito conocerte.

Geno Mesa 17/06/2017


6 gotitas:

chema dijo...

me tranquiliza ver la etiqueta 'albanta', y saber que esta carta-relato es ficticia. a ver, los relatos siempre están basados en la realidad en cierta medida, pero ya me entiendes lo que quiero decir. ;)
todos hemos tenido alguna vez la sensación de que la amistad de una persona se nos escapa como arena entre los dedos...

Geno dijo...

Bueno, este está un poco basado en hechos reales, pa que te voy a engañar. Pero sí, hay amigos que duran toda la vida y otros quedan por el camino, es ley de vida.

Mercedes dijo...

Es una pena tomar cariño a alguien, tener la certeza de que es amistad verdadera y vivir la separación, a veces sin saber por qué ha ocurrido. A todos nos ha pasado más de lo que desearíamos, pero desgraciadamente así es la vida. Los amigos de verdad pueden contarse con los dedos de una mano, por eso hay que mimarlos todo el tiempo. Besitos, me ha encantado el relato, me atrae mucho el género epistolar desde siempre.

Geno dijo...

Gracias, Mercedes, me alegro que te guste. Sí que es triste dejar amistades por el camino pero si encima no entiendes el porqué, es peor aún pero bueno, afortunadamente siempre están ahí los de verdad, los que no fallan :-D Besos

Zelgadiss dijo...

Buena carta de ficción, basada en la realidad (por desgracia a muchos nos ha pasado algo tan parecido a la situación que relatas aquí). T_T

Geno dijo...

Sí, tampoco a mi es la primera vez que me pasa pero sí la primera que lo reflejo en un relato XD es cuestión de fijarse más en los que se quedan que en los que se han ido ¡que les vaya bonito!