sábado, 28 de septiembre de 2013

Rescatando relatos. El silencio y la noche

Me gusta la noche. Pero no la noche bulliciosa del centro de la ciudad, atestado de vehículos ruidosos haciendo sonar el claxon, con la gente apelotonada en los bares de música a todo trapo. Esa noche donde la gente se habla a voz en grito, ríe en estruendosas carcajadas y resuenan los tacones en un ajetreado caminar. Allí donde apenas si te oyes tus propios pensamientos.
Me gusta la noche de mi casa, en el barrio a las afueras, cerca del campo y lejos de tal algarabía, un lugar apartado, donde apenas circulan coches. El silencio lo rodea todo. Quizá, de cuando en cuando, el sonido de algún grillo que hace “cric-cric” en la lejanía. O el compás reposado de mi respiración. La tranquilidad campa a sus anchas en el ambiente y hace que la agitación del día a día caiga en el olvido.
Cuando llego a mi hogar, después de una agotadora jornada de trabajo, tras la cena y un relajante baño reparador, nada me resulta más apetecible que salir a mi pequeño balcón. Con una cerveza fría en una mano y un cigarrillo en la otra, me siento a contemplar el cielo, no sin antes ponerme una chaqueta, que a esta altura el aire siempre es fresco. Primero hago balance de lo acontecido a lo largo de las horas anteriores. Intento descargar mis frustraciones y esbozar una solución a los errores que haya podido cometer pero también me felicito por mis aciertos. A continuación mi mente se desocupa y a medida que pasa el tiempo veo como las luces de los edificios cercanos se van apagando una tras otra, poco a poco. La gente se retira a descansar. Los padres arropan a los niños en sus camas y les desean buenas noches. El estudiante del piso de enfrente se prepara para una larga noche de estudio rodeado de apuntes y con la cafetera a mano. Y su vecino de puerta se prepara para salir a enfrentar una vez más su trabajo de vigilante. El silencio cada vez es más notorio. Y respiro hondo, empapándome de esa sensación de paz por dentro y por fuera.

Tras un montón de horas rodeada de ruido de motores, timbres de teléfono, gente gritando con los nervios a flor de piel, en la vorágine de la vida en la gran ciudad… este se convierte en el mejor momento del día, el momento del silencio. Alguna noche incluso, descubro alguna estrella en el firmamento.
Texto: Geno Mesa
Foto: Geno Mesa

domingo, 22 de septiembre de 2013

Clásicos de verano

Después de ver el musical el año pasado en mi viaje a Londres, me había entrado a mi el gusanillo de leer Wicked, memorias de una bruja mala de Gregory McGuire y por fin le encontré el hueco adecuado. 
Elphaba debido a una poción que su madre se toma, nace con una particularidad que la hará muy especial: su piel es verde. Eso hará que le cueste encajar en una sociedad bastante discriminatoria como es en la que vive. Empezará a estudiar en la Universidad de Shiz donde poco a poco se irá abriendo y haciendo amigos pero también encauzando su carácter hacia una rebeldía contra las normas del lugar donde vive, volviéndose defensora de los más débiles y atacados y un tanto revolucionaria.
Como ya sabréis, la historia cronológicamente se sitúa antes de la llegada de Dorothy al mundo de Oz y antes de que Elphaba llegara a ser la Malvada bruja del Oeste.
Para que voy a engañaros, el libro no es una maravilla, tiene momentos bastante densos y pesados de leer y ¡¡Elphaba no es mala, ni malvada, ni nada de eso!!
En fin, que mi recomendación es, que si os interesa conocer la vida de la "malvada" Bruja del Oeste, procuréis ver el musical, muchísimo mejor. Eso sí, después veréis la película del Mago de Oz con una perspectiva bastante diferente... al menos a mi me pasó.

Para agosto un clásico entretenido, juvenil y facilito, tanto que nos aventuramos a leerlo en inglés: Charlie and the chocolate factory de Roald Dahl. 
Charlie es un niño que vive en una modesta casita con sus padres y sus cuatro abuelos casi pegada a la mayor fábrica de chocolate jamás conocida. Un buen día, el señor Willy Wonka, dueño de la fábrica, anuncia a bombo y platillo que en cinco de sus chocolatinas habrá un billete dorado que se traduce en una entrada para visitar su fábrica, algo soñado por la inmensa mayoría de los niños y los no tan niños. Charlie no cree poder conseguirlo porque solo se puede permitir comprar una chuchería al año, justo el día de su cumple, pero la suerte se pondrá de su lado y ¡por fin! podrá acceder al interior de esas paredes que día tras día observa al ir y volver del colegio.
Existen dos adaptaciones cinematográficas de esta novela, una de 2005 protagonizada por Johnny Depp y dirigida por Tim Burton y la primera de 1971 con Gene Wilder en el papel del Señor Wonka.

Y para septiembre y así terminar con mi lista de "pendientes de Roald Dahl", Matilda
La protagonista de esta corta novela es la niña que lleva el nombre que le da título. Tiene cinco años y, a pesar de su corta edad, ya lee perfectamente y se sabe todas las tablas de multiplicar. Por desgracia para ella ha nacido en una familia que es todo lo contrario a su forma de ser: no les gusta leer, viven pegados a la televisión y se burlan de la inteligencia de su hija.
Cuando empieza al colegio tampoco las cosas parecen mejorar mucho puesto que la directora, la señora Trunchbull es bastante intransigente y castiga  a los alumnos solo por el placer de torturarlos. Por suerte para Matilda allí encontrará a una persona que la valorará como merece, la señorita Honey.
Totalmente recomendable para pasar un muy buen rato.
Como otras obras de Dahl Matilda también ha sido objeto de adaptaciones, tiene película y musical:

martes, 17 de septiembre de 2013

Camiseta tuneada II

Después de haber quedado tan contenta con mi primera experiencia rediseñando camisetas tenía ganas de ponerme con las otras dos pero no me terminaba de decidir por la aplicación a poner. Quería algo bonito y con algún significado al menos para mi. Y de pronto surgió la idea:
Me explico: en aquella primera lista de recomendaciones de doramas que Elphaba me envió allá por el año 2009 venía uno titulado Proposal Daisakusen del que os hablé aqui. Pues en el capítulo 8 de dicha serie el prota, por hacerse un poco el chulito, insiste en que las siglas DKNY (Donna Karan New York) significan Don't Knock New York, lo que causa las risas de sus colegas y la petición de la chica de sus sueños de querer un bolso de esa marca. Pero Yamapi (el prota chulito) que siempre ha demostrado ser un tio con suerte, se cruza con el dichoso bolso, descubre que es el premio de un juego y se gasta todos los ahorros para conseguirlo. Y lo consigue para sorpresa de amigos y chica.
Siempre me hizo mucha gracia el dibujo, el dorama es de mis favoritos y el que consigue el bolso... en fin... mejor me callo :-P Así una vez decidido el diseño, me puse manos a la obra: escoger telas, sacar el patrón...
...cortar, pegar, coser y ¡listo! 

¿Qué tal ha quedado?

Y ahora pongo esta canción de la banda sonora del dorama, porque sí, porque quiero, me gusta mucho y el enlace del otro post ya no funciona... :-(

小さな恋の歌 - MONGOL 800 chiisana koi no uta por yuri304

jueves, 12 de septiembre de 2013

Rescatando relatos: El terror más profundo

De repente despertó. Abrió los ojos y pensó: “Caray, que oscuro está esto, debe ser noche cerrada aún”. Intentó moverse pero notó algo raro “¿Dónde estoy? Esto está muy duro para ser mi cama. Jajajajaja, a saber donde he acabado” Intentó hacer memoria y empezó a recordar:
“Sí, ayer salimos y después de recorrer todos los bares de la zona creo que Inés nos invitó al jardín de su chalet. Recuerdo haber seguido bebiendo… joer, no me extraña este dolor de cabeza que tengo … ¿cuánto habré bebido al final? … para, para, que me estoy despistando…a ver. Pusimos música… ¿bailamos? … ¡¡ufffff!! Ya no me acuerdo de más. Si pudiera ver qué hora es”
Entonces intentó estirar el brazo derecho para tantear a ver si encontraba una mesilla de noche con una lámpara o algo similar, pero su mano chocó contra lo que él creyó que era una pared, a pocos centímetros de su cuerpo. Probó con el izquierdo pero… ¿Qué era aquello? ¿Otra pared? ¡Demonios! Si también tenía un techo a poca distancia de su nariz.
Su corazón empezó a acelerarse y sus nervios se alteraban por segundos. Se tocó el cuerpo.
“Muy bien, llevo la misma ropa que llevaba ayer cuando salí de mi casa. Piensa, Nico, piensa … bolsillo derecho del pantalón … a ver … sí, unas monedas. Entonces en el bolsillo izquierdo … ¡¡Sí, aquí está!!” – pensaba mientras sacaba del bolsillo izquierdo de su pantalón un mechero que llevaba “por si alguna tía buena se acerca a pedirme fuego” puesto que él no fumaba.
Asustado, ya que no sabía lo que iba a encontrarse, encendió la pequeña llama y …
“¡¡UN ATAUD!! ¿Estoy metido en un ataúd?”
Su corazón empezó a latir más fuertemente aún y un sudor frío empezó a recorrerle el cuerpo a la vez que inútilmente intentaba levantar la tapa. No se movía. Empezó a gritar, fuerte, pero parecía que nadie le oía …
De repente despertó. Abrió los ojos y vio todos sus amigos rodeándole y mirándole con cara de preocupación. Y les oyó.
“Mirad, mirad, por fin se despierta, está abriendo los ojos, ¡joer, tío! vaya susto nos has dao y encima esos gritos ¿por qué gritaste así?”
Le contaron que, bailando, se había subido a una mesa del jardín y, no saben si por efecto del alcohol o porque había resbalado, aunque sería un poco de todo, se había caído dándose un golpe en la cabeza. Había estado inconsciente unos cinco minutos que para él fueron los peores cinco minutos de su vida.

Cuando Nico les contó lo que había sucedido en su cabeza en esos minutos de inconsciencia sus amigos le decían “Bah, solo fue un sueño, un mal sueño” Pero para él fue algo más, algo que lo marcó de por vida, una pesadilla horrible que ha hecho que solo el pensar en subirse en un ascensor o entrar en cualquier pequeño reducto sea para Nico su terror más profundo.

viernes, 6 de septiembre de 2013

Mis series de ahora

Pues en espera de que lleguen nuevas temporadas o de que terminen de emitirse otras para verlas del tirón, no ha quedado más remedio que renovar la parrilla de series.
Crónicas vampíricas. Lo primero que puede llamar la atención de esta serie es su pequeño gran parecido con la saga Crepúsculo: vampiro (Stefan, Paul Wesley) que se enamora de humana (Elena, Nina Dobrev) que cuando descubre su condición de "chupasangre" lo acepta con total naturalidad porque su amor es tan grande que puede con todo. 
Más tarde van surgiendo las diferencias: ella no quiere transformarse, aparece el hermano malo (Damon, Ian Somerhalder) del protagonista (que luego no es tan malo como quiere aparentar) y aunque también aparecen hombres-lobo (Tyler, Michael Trevino), estos no tienen nada que ver con Jacob y su familia.
También puede destacarse la gran proporción de chicos y chicas guapos que alberga el elenco. Sí, vale, para gustos hay colores pero raro sería que ni uno llamase un poco la atención a el/la televidente.
Si bien al principio no me llamó mucho la atención ha terminado enganchándome aunque últimamente se está volviendo más sangrienta (sí, claro, habiendo vampiros, tendrá que haber sangre) y sí, vale, puede que hayan ayudado a mi enganche Jeremy (Steven R. MacQueen, nieto de Steve MacQueen, por cierto), el hermano de la protagonista y Alaric (Matthew Davis), que llega al pueblo como profesor del instituto aunque su fin es capturar a Damon.
 
Mad men. Hace años que me la vienen recomendando y es ahora cuando encontré el momento de verla. Relata el día a día de Sterling Cooper, una agencia de publicidad de Nueva York en los años 60 y las relaciones entre los trabajadores de la misma y sus familias.
El personaje principal es Don Draper (John Hamm), casado y con dos hijos. Es el mejor publicista de la compañía y capítulo a capítulo iremos descubriendo que tiene mucho que ocultar en su vida.
Cabe destacar a Peggy Olson (Elisabeth Moss) que, aunque empezó como secretaria de Draper consigue ascender a creativa por propios méritos, lo cual le acarreará más de un problema por ser una sola mujer en un mundo de hombres.
Y como hay que dejar lo mejor para el final, termino el post con la joya de la corona de mis últimas series: Entourage titulada en España El séquito. Llegué a ella por recomendación de Zelgadiss tras un comentario sobre Ralph Macchio que hace un cameo en uno de los capítulos. Así que me puse a ella para encontrar a mi querido Daniel-san y, sin darme cuenta estaba totalmente pillada.
El protagonista es Vincent Chase (Adrian Grenier) actor en pleno apogeo de su carrera que va a todas partes acompañado de su hermano Johnny "Drama" Chase (Kevin Dillon) que siempre presume de su gran éxito como actor en los '80 pero que está totalmente de capa caída;  Eric Murphy (Kevin Connolly), que hace las veces de representante de Vince; y Tortuga (Jerry Ferrara), chófer, chico de los recados... El secreto de esta relación a cuatro es que son amigos de la infancia, siempre han estado juntos y siempre lo estarán.
Personaje importante es Ari Gold (Jeremy Piven) agente del actor, siempre pegado a su teléfono móvil y que se desvive por conseguirle los mejores trabajos. Aparenta ser duro en el trabajo, homófobo, misógino, pero en el fondo demuestra que no es nada de eso aunque sí es vengativo y cuando tiene que darle caña a alguien, se la da sin despeinarse. De hecho hace un dúo estupendo con Lloyd (Rex Lee), su ayudante, el blanco de todos sus chistes sobre gays pero sin el que no puede vivir.
Aparte de su argumento, es de gran atractivo en la serie la cantidad de cameos a los largo de sus ocho temporadas tanto de actores, directores, guionistas haciendo de sí mismos: el ya nombrado Ralph Macchio, Mark Whalberg (a la par uno de los productores de la serie), Matt Damon (de los mejores), Jessica Alba, Jamie-Lynn Singler, Bono, James Cameron, Lebron James, Martin Scorsese....

lunes, 2 de septiembre de 2013

Leyendojunt@s de agosto

Seguimos con las lecturas veraniegas con El despertar de la Señorita Prim de Natalia Sanmartín Fenollera. Cuando Prudencia lee el anuncio del periódico solicitando una persona para clasificar una biblioteca, algo que no sabe qué es la impulsa a presentarse al puesto incluso cuando se especifica claramente que no aceptará gente con titulación y ella de títulos va servida.
Aún así es aceptada y se traslada a vivir a San Ireneo de Arnois, donde poco a poco se irá dando cuenta de que aquella no es una población normal, vive bajo sus propias directrices intentando conseguir un modo de vida tranquilo en el que trabajan pocas horas y cada uno en aquello para lo que se ve capacitado o lo que le guste siempre y cuando ese puesto no esté ocupado ya.
La señorita Prim poco a poco irá acostumbrándose a esta manera de vivir que, en un principio, le resulta inconcebible.
La historia es bastante fantasiosa aunque quizá no estaría mal vivir en un lugar como San Ireneo. Interesantes y nada pesadas conversaciones entre los personajes sobre filosofía, educación, religión y muchas referencias literarias, ayudan a que esta novela sea de lo más entretenido.
Siendo una recién nacida, Rosa es llevada a un convento de clausura en Florencia donde se cría con las monjas hasta que, a la edad de quince años el marqués de Scarfiotti la lleva a su casa para que sea la institutriz de su hija Clementina. Así comienza Melodía en la Toscana de Belinda Alexandre y la vida de nuestra protagonista que estará llena de aventuras y desventuras después de que, por una injusticia, es expulsaba de la villa donde trabaja.
Bastante previsible en todo su argumento, de estos que dos o tres páginas antes al menos, ya sabes lo que va a pasar pero no por eso deja de ser menos interesante. Ah bueno, salvo en una cosa que me sorprendió y dejó boquiabierta.
Y cambiando totalmente de temática, termino el mes con Los litigantes de John Grisham. Tras sufrir un ataque de pánico en su trabajo en un gran bufete de Chicago y emborracharse hasta no poder más, David Zinc acaba dando con sus huesos en el mucho más modesto despacho de Finley & Figg que sobreviven defendiendo conductores borrachos o tramitando divorcios. Viendo una posibilidad de cambio en esa vida tan estresante que lleva, David se quedará trabajando para ellos. Es entonces cuando se les presenta el caso de sus vidas, la posibilidad de hacer algo grande y, a pesar de las reticencias de algunos, se encontraran metidos de lleno en la demanda a una famosa empresa farmacéutica.
Una historia más de abogados que tan bien se le da contar a Grisham, intrigante y difícil de soltar antes de conocer el final.