Crónica de un viaje anunciado

Después de un viaje tranquilo y sin ningún problema, llegamos a León unos minutos pasadas las dos y media de la tarde. Bajo un sol de justicia nos fuimos a dar un paseo por el casco antiguo. La visita a la Catedral es obligada como lo es tomarse un vinito y zamparse una tapa en el Húmedo. En un plan de turista total, es decir, cámara de fotos en mano y gafas de sol, dimos unas vueltas buscando un sitio donde comer: menú apetecible y asequible. Lo encontramos y comimos en una terracita como unas reinas y atendidas por un camarero muy simpático.

Después a tomar el cafetín donde dos de nosotras que cumplimos años la semana que viene, fuimos sorprendidas con ¡nuestros regalitos! Para mi "La chica que soñaba con una cerilla y un bidón de gasolina" y un super estuche de maquillaje en el que me voy a volver loca para escoger sombras porque ¡son todas preciosas!

Una vez con el estómago lleno, medio reposado (los sillones de la cafetería eran hipercómodos) y cargadas de bolsas, un poco más de turismo: la Iglesia de San Isidoro, la feria del libro y ¡de repente! la hora había llegado. Por los altavoces se empezó a oír el anuncio de que en el antiguo ayuntamiento se encontraba Purita Campos. Atravesamos raudas y veloces el recinto, la plaza y nos plantamos allí.

Llegamos de las últimas pero fue una suerte porque eso hizo que el organizador nos pusiera en primera fila. Allí la teníamos, toda para nosotras. Después de una charla de más o menos media hora, comentando sobre el nuevo boom de "Esther y su mundo", sobre lo mucho que nos gustaba y mil cosas más, salimos afuera de nuevo a la carpa que tenían preparada para que la dibujante nos firmara nuestros libros.

Estherasturianas en primer lugar, una a una, fue dibujándonos una Esther. Es impresionante como trazo a trazo va surgiendo la pecosa ante tus ojos. Agradable, simpática, pendiente de todo lo que queríamos decirle... una persona maravillosa. También estaba por allí su marido, Paco, que la acompaña en todos los eventos a los que acude.¿Algún cotilleo? Se habló de merchandising, de "spin offs"... cosas que aún están en el aire. También de que las nuevas aventuras saldrán en diciembre y fue lo único que conseguimos sacarle sobre ese tema.

¿Anécdota divertida? Por supuesto. Hablando de la reedición, de toda la supervisión que conlleva por, principalmente, la censura a la que Bruguera sometía las historias, nos contó Purita de una viñeta de esas que fueron eliminadas pero que en el tomo correspondiente de la reedición la veremos. En ella Esther ha tenido algún problema con Doreen (¡que raro!) y en el bocadillo de su pensamiento se ve a ella vestida de verdugo, empuñando un hacha y dispuesta a cortarle la cabeza a su enemiga que está atada de manos y preparada para su ejecución. En cuanto que Purita contó esto una fan emocionada gritó: "¿Y por qué no lo hizo?
Por lo visto en la versión española de esta escena no se le permitían esos pensamientos.

Después de esto tomamos algo para relajar y rumbo a Gijón. Media hora nos tuvo el GPS dando vueltas para salir de León, hasta que decidimos encontrar la autopista a la antigua usanza: preguntando y mirando los carteles.