Quien tiene un amigo...

...tiene un tesoro. Y yo tengo dos. Tesoros, digo. Uno, mi amiga, que no es que acabe de averiguar que es un tesoro. Ya lo sabía. No en vano hace años que compartimos amistad así que, por algo será. Y dos, la Nancy pelirroja de su propiedad que ayer pasó a mis manos. Aquí la teneis con su modelito Jacquard ¿verdad que es linda?

Todo empezó un viernes cualquiera frente a una botella de sidra, las dos hablando de todo un poco... o un mucho. Entre ese "todo" del que hablamos, sale a relucir el tema de mis Nancys.

- Y quiero una pelirroja ¡me encantan! - repito sin cesar.

Ella, con curiosidad, se plantea que, la próxima vez que vaya a casa de sus padres, buscará la suya , aunque, cree recordar, era morena.

Pero no. Es pelirroja y tiene el grandisimo detalle, al menos para mi, de darmela (bueno, después de pedirme que le hiciera muuuuuucho la pelota... ¡ejem!) ¡Yupiiii, ya tengo pelirroja! ¡Gracias, guapa! ¡Estoy encantada!