¡Andale, andale, arriba, arriba!

Ayer cené en un restaurante mejicano por primera vez. Sí, sí, habéis leído bien. Nunca había comido en un restaurante mejicano, lo cual no quiere decir que nunca hubiera probado la comida mejicana aunque los precocinados del supermercado no son lo mismo, desde luego. La Panza Llena, se llama el sitio en cuestión. Y es que, que no se diga que solo sabemos ir a cenar a sidrerías asturianas o restaurantes italianos.

Tras un intenso estudio de la carta, sin enterarnos de nada (es lo que tiene no saber) y los sabios consejos de la amable camarera que nos atendió (llegó un momento que parecía que la estábamos examinando, pero ella aguantó estoicamente el interrogatorio), nos decidimos a pedir: nachos, tacos, sincronizadas, todo ello con queso por todas partes, regado con margaritas y, para rematar, un café de olla muy rico y una tartaleta de chocolate... de chocolate en mi caso que aún las hubo que la pidieron de queso también... para no mezclar, supongo.

Y ¿qué no podría faltar en una cena estherasturiana aparte de las estherasturianas, por supuesto, una charlilla sobre nuestra Esther y alusiones varias al foro? Pues como no ¡la lluvia! y es que ultimamente se está volviendo tradición el combinado Quedada estherasturiana-Lluvia torrencial. Aún recuerdo esta con "especial cariño"... luchando contra los elementos por los lugares donde más pega el aire de Gijón... ¡ainsssss!

Y para finiquitar el post, una foto dedicada en especial a mis amig@s del Wonka 70%... Con todos ustedes ¡tachánnnnnnnn! La Tartaleta de Chocolate.