Festival de la sidra de Gijón

Como todos los años, el último fin de semana de agosto se celebra en Gijón el Festival de la Sidra Natural. En él se realizan varias actividades como catas de sidra, concursos de escanciadores y de "cancios de chigre", y las más multitudinarias: el récord de escanciado simultaneo y la degustación gratuita.

De la primera os puedo decir que este año no pude acudir por mi trabajo, pero, pese a mi ausencia, se logró establecer un nuevo récord: 7239 personas escanciando a la vez en la playa de Poniente.

La segunda no me la perdí. El domingo se instalan en la Plaza del Marqués y en la plaza Mayor multitud de chiringuitos en los que se ofrece sidra gratis a todo aquel que quiera degustarla. Único requisito: llevar el vaso. Se establecen dos turnos, uno en la mañana, creo que de 12 a 3, y otro a la tarde, de 6 a 9 horas, en las que los brazos de los camareros están la mayor parte del tiempo en alto y la sidra corre por todas partes. Gran cantidad de marcas de sidra invitan a los asistentes a saborear su producto aunque, como en todo me imagino, algunos podían haberse quedado en casita. Sí, sí, también hay sidra mala.

Este es el día en que se concede le premio del Tonel de Oro a toda una vida dedicada a los llagares y a la sidra, y el premio Elogio de Oro a la mejor sidra del certamen, conseguido en este ocasión por la Sidra Menendez, para mi, la mejor sin duda.

Y en el puerto Deportivo hacia la playa de Poniente se coloca el Mercadillo de la Sidra y la Manzana en el que se pueden degustar gran variedad de productos con la sidra y la manzana como base y otros, sin estos productos, pero igualmente asturianos. Eso sí, aquí toca pagar, pero merece la pena. Recuerdo en otras ocasiones haber probado una tarta a la sidra para chuparse los dedos y que decir de la tarta de queso cabrales ¡hmmmmm, exquisita!

Cuando dan las nueve y los chiringuitos se cierran, todas las voces se unen en una para cantar a grito pelado el "Asturias, patria querida", acompañadas por la Banda de Gaitas de Gijón. Como broche final, los altavoces emiten el "Gijón del alma", coreado también por todos los asistentes.

Y como en todos los grandes acontecimientos de la villa, el Rey Pelayo se une y preside las celebraciones, en este caso escanciando sidra también.

3x2

Uno de los "inconvenientes" de trabajar en un centro comercial es recorrer sus pasillos porque no te queda más remedio pero sin poder evitar ver los productos que ofertan con el consiguiente riesgo de caer en la tentación de comprarlos. Eso fue lo que me pasó ayer de la que salía al mediodía. En la zona de la librería un gran cartel (bueno, quizá no era tan grande...) saltó a mi ojos: "Libros 3x2: comprando una unidad, 3€. Si se lleva 3 cada unidad le sale a 2€" ¡Tres libros por 6€! Por supuesto no pude evitar pararme a mirar aunque con la confianza de que ninguno llamaría mi atención. Error. Enseguida mis manos estaban cargadas con tres ejemplares, que paso a presentaros.

"Otro verano contigo" de Elvira Lindo. Tercera parte de "Tinto de verano", serie publicada por El País. Cierto es que no me he leído las dos partes anteriores pero recuerdo que me picó la curiosidad la primera vez que oí hablar de ellos. Esta es mi ocasión de satisfacerla.

Narra las historias del veraneo de una familia en el mismo pueblo de todos los agostos. La presentan como una novela humorística en la que podemos, los lectores, llegar a pensar que nos están contando experiencias reales, aunque todo es fruto de la imaginación de la escritora.

"Ángel guardián" de Sara Paretsky. La primera razón por la que me animé a leer el argumento de este libro fue que era el más gordo de los que había. La razón por la que me lo llevé, que me atrajo la historia, obviamente. Victoria Warshawski es una detective que decide ayudar a dos de sus vecinos: una anciana que incomoda a los nuevos residentes del barrio y el señor Contreras que quiere localizar a un desaparecido compañero de trabajo que investigaba las condiciones de jubilación de la empresa.

"Sangre en el espejo de la reina" de Carter Dickson. Crimen misterioso a la vista. Una cadáver aparece en medio de la nieve sin más huellas alrededor que las de la persona que lo encontró. ¿El misterio? Cuando se cometió el asesinato ya había dejado de nevar. Parece un crimen imposible...

Y con esto mi torre de libros vuelve a adquirir unas dimensiones desproporcionadas contra las que tendré que luchar duramente.

¡Premio!

Esta superviviente que es Aurin nos ha dejado este bonito premio en su blog.

¡Muchas gracias!

Como todo premio, tiene sus reglas y se trata de pasarselo a otros cinco blogs. He elegido estos porque sí, porque me apetece y me da la gana. Son buenas razones ¿no? jajajjaja:

- Frenesí canino

- Aqui comienza una leyenda

- Mi lengua de trapo

- Rarezas que me rodean

- Teresa Guzmán

En cuanto pueda les dejo aviso para que vengan a por él, si les place, jejeje.

San Timoteo en Luarca

Este fin de semana son las fiestas de San Timoteo en Luarca ¿Que por qué os cuento esto? Porque esta tarde salen hacia allí unas cuantas amigas mías a disfrutar de fiestas, verbenas y fuegos artificiales y yo me lo pierdo por culpa de mi "estupendo" trabajo ¡En fin! Pero aprovecho para contaros un poco de que va esto.

Luarca, llamada la "villa blanca de la costa verde", es una población situada en la costa occidental de Asturias en el concejo de Valdés. Las fiestas de San Timoteo comienzan en la noche del 21 de agosto, con fuegos artificiales y verbena. Al día siguiente, temprano, se despierta a la gente con petardos y, equipados de provisiones, se dirigen a la ermita de San Timoteo, situada en la Campo de San Timoteo. A la cabeza de la procesión van los "romeros" ataviados con chambrón, bastón y una T de pan, junto con un grupo de gaiteros.

Una vez en la ermita se saca al santo y se celebra la misa. Después llega la hora de comer en los campos de los alrededores.

Por la noche se regresa a Luarca y por el camino, desde los balcones se les lanza agua. Después más verbena, con orquesta y sidra "a esgaya" (es decir, a montones, en abundancia).

Como curiosidad deciros que aquí es donde está enterrado el Premio Nobel, Severo Ochoa.

Las crónicas de Narnia I

Esta era una saga que aún tenía pendiente de leer y de la que, por el momento llevo sus cuatro primeros libros. Bueno, los cuatro primeros en el orden cronológico de la historia que no es realmente con el que salieron a la luz estas historias fantásticas escritas en los años 50 por C. S. Lewis.

"El sobrino del mago" nos cuenta como dos amigos, Polly y Digory, se ven transportados a otro mundo con la ayuda de unos anillos mágicos pertenencientes al tio de unos de los niños. Aquí asisten atónitos a la creación de un nuevo lugar llamado Narnia a partir de una canción del león Aslan.

Aunque este es el primer ejemplar en la linea cronológica de las historia, fue escrito y publicado el sexto.

Parece ser que J. K. Rowling es una gran admiradora de este escritor y su obra, razón por la cual su "Harry Potter" también son siete libros e incluso uno de sus personajes recibe el nombre de Digory, al igual que el protagonista de esta historia.

En "El león, la bruja y el armario", publicado el primero pero ocupando el segundo lugar en el tiempo de la obra, cuatro hermanos descubren una armario que les transporta al mágico mundo de Narnia donde conviven extraños personajes y animales parlantes. El mundo está en un estado de invierno permanente bajo el influjo de la Bruja Blanca. Los hermanos Pevensie con la ayuda de Aslan salvaran Narnia de esta temible bruja y reinarán en la etapa más feliz de esta tierra.

El tercero en orden cronológico pero quinto según su publicación es "El caballo y el muchacho". En él un caballo parlante y un muchacho habitantes de Calormen se unirán en una huida por llegar a Narnia. En el camino averiguan que el ejercito planea invadir esta y harán todo lo posible por evitarlo avisando a los reyes que no son otros que los Pevensie. Conseguirán salvar esta mágica tierra con la ayuda, por supuesto del león Aslan.

En cuarto lugar, aunque publicado el segundo, aparece "El príncipe Caspian". Se relata el segundo viaje de los hermanos Pevensie a Narnia donde descubren que, a pesar de que en su mundo solo ha transcurrido un año, allí han pasado 1300 y todo ha cambiado. Un malvado rey se ha alzado con el trono y las criaturas mágicas han de permanecer escondidas. Los cuatro niños ayudarán al príncipe Caspian a derrocar este gobierno y a ocupar el cargo, puesto que a él le corresponde. Organizarán un ejercito y pondrán las cosas en su sitio, siempre con la inestimable ayuda de Aslan. Este será el último viaje a Narnia para los dos hermanos mayores.

Son libros entretenidos y de fácil lectura que, a pesar de parecer lo contrario, enganchan desde la primera página.

Ahora me quedan, para completar la heptalogía "La travesia del viajero del alba", "La silla de plata" y "La última batalla". Pero tendrán que esperar porque ¡por fin! ha caido en mis manos "La reina en el palacio de las corrientes del aire" y ese... no puede esperar.

¡¡Fiesta, fiesta!!

¡¡Que mi nubecilla está de cumpleaños!! ¡¡DOSSSSSS!! Increíble como pasa el tiempo. Así que, aprovechando además que es festivo por aquí, os invitamos a una fiestecilla.
¡¡Pasen y sirvanse!! Un cóctel fresquito que hace mucho calor...

¡¡Mmmmm, que ricooooo!! Pero seguro que entra mucho mejor si lo acompañamos de algún pinchito ¿o no?

Y para terminar, no puede haber fiesta de cumpleaños sin una gran tarta.

¿Ya estais todos servidos? Pues ¡a bailarrrrrrr!

Mi Lily de 1972

El miércoles, mientras tomábamos un refresco en la terraza del Náutico con el sonido del mar y la melodiosa voz de una joven de fondo, hablamos de los que dimos en denominar "Lilys fantasma", es decir, aquellos que suponemos han tenido que existir pero que, en nuestro caso, ninguno hemos visto. Nos referimos a esos primeros números que, haciendo cuentas, me ha salido que debieron publicarse allá por finales de la década de los 50 y principios de los 60. El Lily más antiguo que conservo es este, el número 545 del año 1972 que debí "tomar prestado" a mi prima porque yo en aquella época como que tebeos aún no compraba... y pensándolo bien... quizá ella tampoco ¿De qué mano saldría esta reliquia? ¿Y vosotr@s? ¿cuál es el número más antiguo de Lily que conserváis?
Detalle: tiene fecha del día de mi cumpleaños, jejeje

Super quedada y el misterio del príncipe

Llegamos a la estación de ALSA unos minutos antes de la hora a la que supuestamente debería llegar nuestro invitado de excepción. Raudas y veloces procedimos a colocar la alfombra roja, a acordonar a las masas que se agolpaban por doquier en espera de que el autocar proveniente de Santander arribara al andén. Entonces nos llegan noticias de que si atasco, mucho tráfico... en fin, que va a llegar tarde, porque llegar, llega tarde pero marchar, marcha primero, algo difícil de entender pero real como la vida misma. Así que para hacer más llevadera la espera nos cruzamos a tomar un cafetito con lo que, al final, casi llegamos nosotras las últimas, jajajjaja.

Presentaciones de rigor, que es lo suyo cuando te conoces pero no te conoces y a toda velocidad al restaurante donde teníamos mesa reservada. El tiempo corría y nosotros teníamos poco. Una comida estupenda regada con sidra, como debe ser: pastel de cabracho, navajas, ensalada y tabla de embutidos. Bastante asturiana ¿no?

Mientras esperábamos tan suculentos manjares, intercambio de regalos: lo que he dado en llamar "Kit del turista" (no había tiempo para pararse a comprar souvenirs, así que se lo llevamos hecho: postales, una figurina recuerdín y, como no podía ser menos viniendo de estas tres, una bufandina del Sporting), unos bombones de sidra para protagonizar un post de Wonka 70%, tebeos, marcapáginas conmemorativos, un carné de Emma, vela-horreo... en un momento en aquella mesa no quedaba un resquicio libre. Pero no todo era para él, para nosotras también hubo: un marquito con un dibujo de Emma que se hubo de sortear pero con la promesa para las "no agraciadas" de que recibirán otro en su casa y unos bombones de-li-cio-sos de los que me obligaron a llevarme la mayor parte (¡tengo un disgustoooo, que no os podéis ni imaginar, jajajajjaja!)

Aún la camarera no había terminado de ofrecernos café o postre y ya le pedíamos la cuenta. Nos quedaban quince minutos para mostrar el Puerto Deportivo y la Playa de Poniente que era lo que teníamos más cerca mientras nuestros dedos mostraban otras maravillas gijonesas en la lejanía. Tanto apuro y tanto esfuerzo que resultó ser en vano. Cuando tres minutos antes de la hora llegábamos a la estación, el ALSA ya había salido.

Momento de bajón, de búsqueda de soluciones, para acabar con la más sencilla: sacar otro billete para el siguiente. Entonces empezamos a ver el lado bueno: podríamos seguir turísteando un poco más y pasar por la playa de San Lorenzo, la auténtica, la de verdad. Eso sí, todos pendientes del reloj porque, que pase una vez, vale pero dos sería mucho.

Y de ahí, me fuí al cine. "Harry Potter y el misterio del príncipe" me esperaba. La verdad, no íbamos muy convencidas después de la pifia que habían hecho con "La orden del Fénix", un copi-pega, que si no te has leído el libro no te enteras de nada, pero parece ser que este no era tan denso y lo han podido explicar mejor, aunque no por ello dejo de estar de acuerdo con lo que cuenta Elphaba en su entrada, que lo hace tan bien que no me voy a repetir. En resumen, dos horas y pico que se nos pasaron en un suspiro y un día de lo más atareado y feliz.

Mi libro favorito (relato)

Sus hojas desgastadas por el uso son suaves al tacto. Algunos de sus párrafos están disimuladamente marcados. Sus palabras le reconfortan aunque ya hace mucho tiempo que no lo lee entero. Sabe exactamente a qué pasajes acudir según su estado de ánimo. Lo lleva con ella a todas partes, forma parte de sí misma. Aunque lo trata con mucho cuidado, su portada empieza a despegarse pero es normal dado el número de veces que ha sido abierto. Fue su fiel compañero en las frías mañanas de invierno cuando, sin haber salido el sol, cogía el autobús que la llevaba a la facultad. También la acompañó en la mayoría de sus vacaciones cuando, sola o con amigos, viajaban a algún lugar remoto para desconectar de la rutina.
Esto no quiere decir que no lea otros libros, a montones, es su pasatiempo preferido. Le encanta sentarse en un lugar tranquilo de su casa, con una taza de cacao, caliente si es invierno y frío por el verano, y pasarse horas y horas devorando aventuras.
Cierto día, en una librería vieja y pequeña, encontró uno igual en mejor estado y se lo compró. Pero no era lo mismo. Aunque iguales tanto en el interior como en el exterior la sensación al tomarlo entre sus manos no era la misma. Aquel era su libro favorito, aquel ejemplar que tanto tiempo había pasado con ella, aquel y no otro, independientemente de que fueran gemelos idénticos. El viejo tomo sigue acompañándola día tras día mientras el nuevo acumula polvo, olvidado en una estantería.

Geno M

(Ilustración: cuadro de R. Mesa)

Del pescado al jamón

El viernes volví a trabajar. Un pequeño trabajo que me ocupará diez horas de cada fin de semana pero no me quejo. Diez es más que cero ¿no?

He cambiado de centro de trabajo y aunque sigo dentro del sector de la alimentación, he dejado el pescado por los jamones: los repongo, los coloco e intento aconsejar a los clientes que quieren adquirir uno. He aprendido más sobre el tema en estos dos días que lo que sabía en toda mi vida aunque ¿qué más necesitaba saber salvo lo rico que está a cualquier hora y en cualquier situación?

Me han hablado de serranos y de bodega, de ibéricos de cebo y de recebo, de tiempos de curación y yo echando de menos una libretita donde apuntarlo todo porque no confiaba en recordar tanto dato.

Así que este verano he dejado de cargar con bonitos pero cargaré con jamones. La cuestión es hacer ejercicio sin pagar un gimnasio. Es más, que me paguen a mi.

¿Queréis una tapita?