sábado, 5 de octubre de 2019

642 cosas sobre las que escribir IV

Hacía ya mucho tiempo que no me pasaba por mi nube, más de un año desde la última publicación y varios meses desde mi última visita. Hoy me ha dado por pasar a poner un poco de orden y he encontrado que tengo varios borradores de entradas sin publicar, como este que hoy os muestro. No se si seguiré publicando el resto, si escribiré cosas nuevas o si nunca volveré más que de visita pero esta tarde me apeteció publicar este pequeño texto. Espero que os guste.

Empieza una historia con la frase "Ese día, mi madre rompió todos los platos de la casa..."

Decidió hacer limpieza general en la cocina y eso pasaba por sacar toda la vajilla y darle un lavado. Poco importaba que algún plato estuviera recién fregado tras la última comida.
Resultado de imagen de platos apilados limpios dibujo
Dijo que se le habían resbalado, que aún estaban húmedos. Claro, la culpa para mi que era el encargado de secarlos. Sea como fuere la gran torre de platos que cargaba mi madre para devolverlos al armario se precipitaron al suelo en menos de un segundo. Eso sí, en recoger todos los trozos diseminados por la cocina tardamos más de media hora. Y aún así, no me extrañaría que quedara algún pedazo escondido en algún hueco recóndito.
No se lo que pensará el resto de la familia, si les habrá colado lo del resbalón, pero a mi  mamá no me la da. Tanto la limpieza como el accidente fueron un plan cuidadosamente trazado para ir al centro comercial y hacerse con aquella vajilla que se paraba a mirar con ojos brillantes cada vez que íbamos a la compra desde hace ya unas semanas. Sabía que no podía llevársela a casa así como así. Era necesario deshacerse de la existente y, sobre todo, que pareciera un accidente...

Texto: Geno Mesa (02/09/2017)
Dibujo: De la red

8 gotitas:

chema dijo...

bienvenida de nuevo, geno!! yo te diría que te quedaras, digan lo que digan blogger está muy vivo. :)
en mi casa somos tres personas y se acumulan tantos platos como si fuéramos diez, no lo entiendo. :P sí, puede que la madre quisiera tener una excusa para renovar su vajilla. se pueden encontrar unos platos con dibujos muy chulos a buen precio. ^_^

Geno dijo...

Gracias, Chema. Pues no se lo que haré, ya no es la viveza de blogger lo que no me traía por aquí sino la falta de ideas para escribir, cosa que a ti no te falta nunca. Ya veremos en qué desemboca esta vuelta :-D

Cristales en mi cuerpo dijo...

! Qué bn q hayas vuelto, con un mini relato tan bueno!
Sigue con el blog, q ahora ya no se me olvida leerte.
No sé por qué no puedo comentar con el otro perfil, en fin.

Perín Meison dijo...

Ay, no, q pude ponerlo de otra manera... Un poco lioso esto.

Zelgadiss dijo...

Jajajajaja, el crimen casi perfecto, mira tú que apañada. :p
Bienvenida otra vez a blogger (como si una escribiera mucho... XD)

Geno dijo...

Perin, como le digo a Chema no es por no querer seguir con el blog, es que me faltan ideas para escribir pero bueno a ver si arranco de nuevo :-D
Gracias, Zel, tú bastante más que yo escribes últimamente jajajjaa

Ada dijo...

Hola Geno! Me alegra leerte de nuevo por aquí. Qué bonita historia, mi madre también ha hecho cosas así, y yo también... jejej . Un saludo!

Geno dijo...

Gracias Ada :-D Sí, seguro que todos hemos hecho algo parecido en algún momento con alguna cosa jejeje